Estos días es mejor que no salgáis de casa. En esta época de paz y amor hay más bien estrés a patadas. La gente tiene prisa por llegar a todos lados, buscando a última hora la cena de Nochebuena o el regalo de turno, y los empujones y la mala conducción está latente en la calle.
Y sed buenos. A ser posible no sólo hoy, si no todo el año, sin necesidad de escusas festivas para comportarse como es debido (es decir, permitiendo a los demás vivir sus vidas y no cargarse todo lo que está en tu camino). Si no, el gordete de rojo (o las muchachas ayudantes que Pardillo se está imaginando si lo preferís) no irá a haceros una visita esta noche.
Por último, si le queréis amargar las navidades a alguien, como la licencia de esta página os lo permite, podéis enviar la imagen que ilustra este post a quien queráis.